Por José Granados Fernández

Twitter: @JoseGranadosF

La elección de Personero de Barranquilla, periodo 2020 - 2024, avanza en medio de polémicas y cuestionamientos, que distan de la transparencia pregonada por la pasada y la actual mesa directiva del Concejo Distrital.

En esta oportunidad, la nueva ‘jugadita’ del presidente Juan Camilo Fuentes tiene que ver con una recusación presentada contra él que no tramitó ante la plenaria del Concejo, como lo establecen normas legales. El cabildante, empero, asegura que actuó en apego a lo que dice el Código Contenciosos Administrativo.

El pasado 21 de diciembre, el abogado Edwin Arteaga Padilla, aspirante a la Personería, recusó a Fuentes. Le reprochaba que no había sido imparcial; que limitó la elección a la escogencia de una terna; que prejuzgó al eximir de responsabilidades a la Universidad de la Costa, CUC, sin que los aspirantes hubiesen presentado sus reclamaciones y que ajustó el cronograma de la elección a sus intereses políticos.

Arteaga también le reclamaba que la universidad escogida, “muy ligada incluso a miembros de la mesa directiva del Concejo”, lo “complació escogiendo solamente tres concursantes”. Señalaba a la entidad de estudios superiores de “descalificar a concursantes que alcanzaban el porcentaje exigido”, calificando como malas respuestas que eran correctas, todo con el fin de integrar la terna exigida. Y cuestionaba que la CUC “practicó una prueba que se alejó de los ejes temáticos de la convocatoria”.

Ante estos hechos, como el presidente del Cabildo no se iba a declarar impedido, procedió a recusarlo.

El mismo 21, Fuentes, a través de la Resolución 275, suspendió el concurso al ser notificado de la recusación, “con el fin de iniciar el trámite correspondiente”. Debía hacerlo ante la plenaria del Concejo.

A pesar de los argumentos expuestos, expresados en Emisora Atlántico y otros medios, Arteaga, de manera sorpresiva, se arrepintió y desistió de la recusación. Lo hizo el 23 en un mensaje electrónico dirigido al Concejo, cuyo texto no se ha dado a conocer.

Este mismo día, el presidente Fuentes, a través de la Resolución 276, se dio por notificado del desistimiento, reanudó el concurso y ordenó que una comisión de concejales entrevistara el 24 a los tres finalistas, José Mario Ovalle Romero, Óscar Roncallo Nieves y Miguel Alzate Sánchez.

Concejales consultados afirman que el desistimiento se presentó, presuntamente, “luego de una reunión a puerta cerrada”.

La reanudación del concurso es considerada, por lo menos, una falta disciplinaria de parte del presidente del Concejo, teniendo en cuenta lo que señala el Código Único Disciplinario, en su artículo 48 numeral 46, sobre la demora del trámite de una recusación, como en este caso.

Fuentes, en diálogo con Emisora Atlántico y Zona Cero.com, afirmó, en su defensa, que actuó “dentro de los términos” del Código Contencioso Administrativo que le daba, según él, “5 días hábiles” para tramitar la recusación y citar al Concejo Distrital.

La norma, sin embargo, dice que el trámite de la recusación debía hacerse “dentro de los 3 días después de su conocimiento”.

“Como la obligación es elegir Personero, una vez se presentó el desistimiento reiniciamos el proceso para retomar el cronograma, el 23, y el 24 de diciembre, que es un día hábil, se realizan las entrevistas”, expresó; señaló que como llegó el desistimiento “se interrumpió” el trámite de responder la recusación.

Contrario a lo que asegura Fuentes, el abogado Alfonso Camerano sostiene que el cabildante la dio “un trámite parcial y equivocado” a la recusación.

“Él tenía que haber puesto en conocimiento de la plenaria la recusación para que ésta decidiera”, enfatizó. Aseguró que “cuando (Fuentes) expidió la Resolución 275, de inmediato quedaron suspendidas las competencias de la mesa directiva” del Concejo para tomar una decisión respecto de la recusación.

Camerano observó, asimismo, que la mesa directiva estaba desintegrada para tomar una decisión y con más razón debió enviar el caso a la plenaria. Se refería a que el concejal Ernesto Crissien, segundo vicepresidente, se declaró impedido a raíz de su parentesco con los dueños de la Universidad CUC; Fuentes estaba recusado y solo quedaba para tomar una decisión el primer vicepresidente Mauricio Villafañe, lo que no era factible.

“A mi modo de ver, la mesa directiva no tenía competencia para expedir la Resolución 275”, para reanudar el concurso y pasar por alto la recusación, así se haya dado el desistimiento.

Así avanza, de ‘jugadita en jugadita’, la poco transparente elección de Personero de Barranquilla.